lunes, 23 de mayo de 2016

El Mito del Emprendedor (Gerber)

El Mito del Emprendedor I

Recuperar la visión y pasión por nuestro negocio y llevar ambas acciones a la práctica en todas las áreas de nuestra organización: comercial, finanzas, dirección, satisfacción del cliente, generación de oportunidades, etc., es fundamental para evitar caer en prácticas inadecuadas que nos desvirtúen de nuestro propósito fundamental y debiliten nuestro impulso inicial.


El Mito del Emprendedor (The E-Myth) definido por Michael E. Gerber en 1986 (en su primera versión) se basa en la diferencia entre el técnico y el emprendedor a la hora de desarrollar un negocio. El primero desarrolla su actividad sobre su talento, fortalezas e intereses invirtiendo su energía en ganar cierta independencia y unos cuantos “activos” como máximo. Por su parte el emprendedor libera mucha energía en torno a su entidad consiguiendo un incremento de su capital financiero, emocional y mental mediante el desarrollo de su organización a través de su creatividad y generando valor para sus colaboradores.

La superación del Mito del Emprendedor se fundamenta en replantar las bases del negocio, trabajar sobre su futuro y poner en práctica siete acciones dirigidas:


1.    Liderazgo de Empresa

El tomar “las riendas” de un modo efectivo de nuestra organización es vital para dirigirla de un modo eficiente y más en tiempos de crisis. Debemos considerar en todo momento lo siguiente:

Se debe asumir y aceptar el liderazgo del negocio así como su relevancia y responsabilidad.

Aprender a diferenciar entre distintas opciones, especialmente entre lo relevante y lo de poca importancia (la calibración de lo realmente importante es un punto clave a desarrollar).

Desarrollar una gran capacidad organizativa, especialmente relevante ante el crecimiento de nuestra organización, manteniendo y transmitiendo los valores de nuestro negocio.

Aceptar y promover el cambio y la innovación delimitando los procesos a modificar así como el mejor modo para su ejecución, llevar a cabo una prueba y comprobar los resultados de modo que, en caso positivo, se introduzca en la empresa. En este punto la capacidad de comunicación es muy importante, la palabra debe ser clara, consecuente y transmitir inspiración.


2.    Liderazgo en Marketing

Defiende el compromiso con la creación de nuestra marca diferenciada y de su crecimiento y desarrollo. La determinación de la identidad de la marca es un componente estratégico básico: ¿qué posee la organización?, ¿qué hace?, ¿qué parece? y como actúa en comparación con sus competidores.

Nuestros rasgos distintivos deben quedar patentes para todos aquellos que entran en contacto con nuestra empresa (partes interesadas): clientes, colaboradores, proveedores, trabajadores, etc.

El marketing traduce la visión de la entidad en algo palpable mediante el trabajo de aspectos globales en todo el trato con el cliente: trato, ambiente, disposición de elementos, vestuario, limpieza, facilidades, información, comodidad, lenguaje, etc., evitando en todo momento lo que Kotler denomina los 10 pecados capitales del marketing.


3.    Liderazgo Financiero

Considerando como principio la maximización del valor de la empresa la estrategia financiera pasa por considerar la organización como una caja negra que recibe dinero, le añade un valor mediante sus procesos y operaciones y devuelve más de lo recibido.

El Mito del Emprendedor II

Puntos como la optimización de las inversiones (importante el control del flujo de efectivo), optimizar el valor añadido de las carteras de negocio (correcta gestión de sus recursos), minimizar gastos y reducir factores de riesgo (existencia de planes de contingencia, desarrollo de copias de información, planteamiento de fondos de capital en reserva, etc.)*.


Nota*. El autor también delimita la minimización de pago de impuestos: un método bastante impopular con la que está cayendo. Simplemente informar más allá de paraísos fiscales realmente su planteamiento se focaliza en considerar todas las derivaciones fiscales futuras de nuestras decisiones financieras (en aras de no “sacrificar” nuestra rentabilidad en un futuro).


4.    Liderazgo en Dirección

La búsqueda del alto rendimiento laboral así como de la eficacia de los procesos que conforman la organización dentro de una cultura de cambio organizacional es un aspecto esencial a considerar por parte del la Dirección de la empresa. El fin último es que la cultura se perpetúe y regenere con cada oportunidad que se presenta.

La creación de un entorno laboral de alto rendimiento debe tener siempre presente la visión de la organización y debe apoyarse en estructuras adaptadas a sus objetivos empresariales, proporcionando a su vez al personal las herramientas adecuadas para lograr las metas planteadas.

En relación a este punto se deben tener en cuenta tres puntos relevantes: la visión que debe ser constantemente transmitida así como los valores fundamentales en la totalidad de los procesos de la empresa, la estructura que debe encontrarse adaptada al negocio y no al revés y la formación e información (vital cada vez más en un mayor número de negocios) adecuadas y constantes.


5.    Liderazgo en Satisfacción de Cliente

El diseño, la implementación y mejora de procesos operativos, de formación y gestión de la entidad así como la coordinación de estos tres sistemas es el pilar fundamental de apoyo para conseguir la satisfacción del cliente.

La integración correcta de estas tres piezas queda perfilada por la capacidad que tiene la organización para mantener una relación duradera con sus clientes. Así la planificación, control y evaluación periódica de los procesos de producción (o prestación del servicio), proceso de entrega (incluido en el anterior en las empresas de servicios) y el servicio al cliente (en todas sus vertientes) define la base para conocer y satisfacer las necesidades de los clientes, siendo la base para la calidad de toda la organización.


6.    Liderazgo en Conversión de Oportunidades

El Mito del Emprendedor III
Se entiende por oportunidad cualquier “opción” de generar un ingreso: solicitudes de información, muestras de interés, gestión de reclamaciones así como cualquier contacto con clientes existentes o potenciales.

El proceso debe definirse para lograr el mayor número de clientes y debe considerarse que la decisión de compra está influenciada por siete factores: información, entendimiento, aclaración de las necesidades, consejo, asistencia, confianza y la propia realización de la venta.

La conversión de oportunidades pasa por satisfacer las necesidades del cliente de modo que sea éste el que encuentre razones para su decisión (fundamentalmente emocionales). Los pasos universalmente aceptados son: establecimiento de contacto, repetición del mensaje emocional, determinación de las necesidades del cliente, ofrecimiento de una solución y oferta del producto o servicio; esta dinámica tiene la ventaja de que cada paso va reforzando el contacto con el cliente y apoyando gradualmente la decisión de compra.


7.    Liderazgo en la Generación de Oportunidades

La empresa debe encontrar métodos o medio para hacer llegar su mensaje a sus mercados objetivo o clientes potenciales (los llamados canales: prensa, televisión, radio, internet, carteles, eventos, promociones, etc.), considerando como objetivo equilibrar el “como” (el canal) con el “que” (la propuesta de valor de la empresa) de modo que se despierte el interés por la oferta y se facilite el acercamiento del cliente garantizando su tratamiento en función de sus necesidades particulares y reforzando nuestra diferenciación en relación a nuestros competidores.


En resumen las “nociones” de Gerber enfocan el desarrollo de cualquier organización desde diferentes visiones que consideran tanto los aspectos de gestión, financieros y de publicidad asumiendo parámetros de gestión del cambio y enfocando la entidad hacia el cliente, tanto para la generación de oportunidades como su satisfacción general y teniendo en cuenta en todo momento la transmisión de la visión y los valores (pasión, propósito y práctica) de la organización en el desarrollo de su actividad.


“No trabajar en nuestra empresa, sino trabajar para ella”.
Michael E. Gerber, empresario y formador de negocios estadounidense.





2 comentarios:

  1. Excelente post sobre el Mito del emprendedor de Gerber. Puedo decir que es uno de los libros que más me ha ayudado a convertirme en un auténtico emprendedor y no solo en un autónomo o freelance.

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    1. Muchas gracias Gustavo por tu comentario.
      Recibe un cordial saludo.

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